¿Cómo reconocer el comportamiento suicida en los niños?
¿Cómo reconocer el comportamiento suicida en los niños?
El comportamiento suicida es una acción destinada a lastimarse uno mismo e incluye los gestos de suicidio, los intentos de suicidio y el suicidio consumado. En la ideación suicida existen pensamientos y planes de suicidio.
Los intentos de suicidio son actos autolesivos que podrían provocar la muerte, como, por poner un ejemplo, colgarse o ahogarse.
Siendo un tabú con numerosas causas, el suicidio infantil es un tema delicado que muchas veces es difícil de diagnosticar.
El término “suicidio infantil” designa el acto por el cual un niño provoca su propia muerte de manera voluntaria. En la mayoría de los casos, esto no significa simplemente un deseo de morir, sino que aparece como el último recurso para escapar de un gran sufrimiento o de una situación para la cual el niño no encuentra salida.
Un intento de suicidio es definido como un acto –no exitoso- a través del cual el niño expresa un deseo de lastimarse, poniéndose en peligro, con la intención de provocar su propia muerte.
Los intentos de suicidio no son siempre intentos fallidos. Muchos son considerados como un intento desesperado de llamar la atención hacia los problemas o sentimientos de maltrato que el niño experimenta.
A veces, los niños y los adolescentes que intentan suicidarse están enfadados con parientes o amigos, son incapaces de controlar la ira y dirigen su enfado contra sí mismos.
Desean manipular o castigar a otras personas (“Se arrepentirán después de que yo muera”). Las dificultades de comunicación con los padres pueden contribuir al riesgo de suicidio.
En ocasiones, el comportamiento suicida se presenta cuando el niño imita las acciones de otras personas.
Por ejemplo, un suicidio al que se ha dado mucha publicidad, como el de una persona célebre, a menudo viene seguido de otros suicidios o intentos de suicidio. De igual modo, los suicidios por imitación ocurren en las escuelas o institutos.
Las señales comunes de advertencia del suicidio incluyen:
- Hacer afirmaciones suicidas
- Estar preocupado con la muerte al conversar, escribir o dibujar
- Regalar pertenencias
- Despedirse de las personas como si no se las fuera a ver de nuevo
- Distanciarse de amigos y familiares
- Tener comportamiento agresivo u hostil
- Descuidar el aspecto personal
- Escaparse del hogar
- Comportamiento arriesgado
- Un cambio en la personalidad (por ejemplo, pasar de ser alegre a ser callado)
Los signos de advertencia no siempre son obvios y pueden cambiar de persona a persona. Algunos dejan en claro sus intenciones mientras que otros guardan en secreto sus pensamientos y sentimientos suicidas.
Es extremadamente importante que usted tome en serio todas las amenazas de suicidio y busque tratamiento inmediato para su hijo o adolescente.
Si eres un niño o un adolescente y tienes estos sentimientos, habla con tus padres, un amigo adulto o con tu médico inmediatamente para conseguir ayuda.
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